Harvest Moon


Hay discos de obligada escucha. Hay discos que siempre apetece escuchar. Harvest Moon pertenece a ambas categorías a la vez. Al menos para mí. Nunca lo ví como una continuación de nada. Harvest Moon tiene personalidad propia. Fragancia. Estilo. Hondura. Capacidad de trasladarte a sitios y lugares. Escuchar One of These Days me hace pensar en el campo. Estar tirado en el suelo. Al fuego. Harvest Moon en la canción que te gustaría ser capaz de dedicarle a ese alguien especial. Unknown Legend o Dreamin' Man me describen. A mi. A mi circunstancia.  A mis sueños de pequeño alimentados por televisión y películas. Seguramente lo hace con cientos de personas. War of Man o Natural Beauty entran más en el compromiso del propio Neil. From Hank to Hendrix a los inevitables problemas de la convivencia. A la duda. Al perdón. Todo tan cercano. Tan humano. Tan cálido. Contado con poso y tranquilidad. A la vez repleto de belleza. De coros. De detalles. De arreglos maravillosos donde sus amigos Ben, James, Emmylou ... dicen tanto con tan poco. Justo lo que echas de menos en los discos del Neil actual. Esa falta de detalle. Nada que ver con aquel ya muy lejano 1992. Un Neil Young en absoluta vena de acierto. Ragged Glory, Harvest Moon, Weld, Sleeps with Angels. Cada uno en su estilo. En su forma y manera. Una época que no tiene nada que envidiar a ninguna otra del canadiense. De entre ellos. Harvest Moon será siempre especial. Ese que cuando vas a la estantería y tienes que elegir, siempre tendrá su oportunidad. Siempre apetece que te hagan sentir bien a la luz de las velas.

Comentarios

Gonzalo Aróstegui Lasarte ha dicho que…
Igual le penalizó venir después de la apoteosis eléctrica de "Ragged Glory" y "Weld", pero es un gran disco, como bien escribes.

Abrazos, J.
J Aybar ha dicho que…
El descanso del guerrero ...