Brittany Howard


Algo se mueve ultimamante en la musica negra. La musica negra de raiz tradicional y cercana al pop, soul o rock quiero decir. Desafortunadamente mis conocimientos de rap y demas son muy limitados asi que ahi, ni se me ocurre entrar. 

Me gustaría hablar hoy del nuevo disco de Britanny Murphy. Especie de gurú de la renovación de este sonido soul y que ha sacado una colección de temas que suena a gloria bendita y que lo mismo te recuerda a sus Alabama Shakes como a Marvin Gaye, a Jon Baptiste o la música disco de los 80. 

Dificil no dejarse llevar por esta especie de discos espectaculo en los que el autor mezcla estilos con soltura y en los que la creatividad parece tener absoluta carta blanca. Temas como I don't de evidente sonido setentero, convive con otros como Red Flag en los que parece que Solomon Burke se ha comido al Beck de Mellow Gold. 

No sé. Tal vez no sea tan para todos los públicos como los premios parecen querer decir. Recordad que estamos en tiempos de igualdades y paridades y eso tambien cuenta a la hora de dar estatuillas y portadas de revista. Pero, la apabullante oferta que va de Brittany a Valerie June, de Alison Russell a Jon Baptiste o de Yola a Sunny War o a los Black Pumas es asombrosa y configura una escena que no es posible ignorar. Más que nada y por encima de todo porque, perdon si soy pesado, supera en creatividad y con creces a las docenas de cantautores de corte pop-country-folk más o menos inspirados que abundan por doquier.

El batiburrillo del disco de Britanny es digno de estudio. Suena Another Day o Prove it to You y creo que el nombre del Beck loco de los 90 no me ha salido de manera gratuita. En Samson parece que Ornette Coleman se va a salir del disco. Power to Undo parece un indisimulado homenaje al genio de Minneapolis. ¡Es que hay absolutamente de todo!. 

Cierto es que Alabama Shakes tuvieron su momento. Tal vez también es cierto que se les epitafió demasiado pronto. Thunderbitch fue una descarga de adrenalina. Quien sabe si temporal o con continuidad. Pero la carrera en solitario de Miss Howard huele a imparable y claramente encaminada a la larga duración. No podría estar más contento con ello.

Comentarios