Godspeed Mark!
Sweet Oblivion, Vitalogy, Congregation y Without a Sound. Screaming Trees, Pearl Jam, Afghan Whigs y Dinosaur Jr. Esa fue la compra del día en una tienda de discos de Jardín de la Reina en Granada en un lejano dia de 1995. Pequeña. No duró mucho. Ni siquiera recuerdo el nombre. Fue mi primer Lanegan. A él llegué por Cesar Martin - como siempre - y por la banda sonora de Singles donde Nearly Lost You brillaba entre muchas otras gemas de la época. Caí rendido a los pies de Mark y sus chicos inmediatamente. Mi Seattle favorito. Luego llegó Whiskey for the Holy Ghost, vinilo que compré en Melgamusic. Un clásico del disquerío granaíno que creo que también ha desaparecido. Aquello era otro Mark. Más intenso. Más oscuro. Con un J Mascis tocando de otra manera. Menos adictivo. Necesitaba mas poso. Hoy, una obra maestra en mi colección. Desde ahí llegaron Uncle Anesthesia - regalo de cumpleaños del gran Arthur -, Dust comprado en Londres durante unas vacaciones, la Antologia de los SST Years co