Jason Isbell

Hoy le hemos dado cancha a Jason Isbell. Con y sin los 400 Unit. Cara amable del panorama actual que da vueltas en mi ordenador de manera muy habitual durante mis días de trabajo. 

Southeastern (2013), the Nashville Sound (2017) y Sirens of the Ditch (2007) han sido los elegidos.

Sirens of the Ditch es el disco con el que le descubro como solista. Todo muy a tiempo. 2007 son mis primeros días como bloggero y recuerdo recibir uno de mis primeros comentarios a cuenta de este disco. Uno perfectamente confeccionado y cuidado. Ya hay una personalidad que cuidar. Hood y Conley ya no estan. Un disco que sin abusar del medio tiempo y la balada Southern, marcará la pauta de todo lo que vendrá después. 

Acaba de salir de los Truckers con lo que aún se percibe bastante energía rock que luego le irá abandonando y llevándole hacia parametros cada vez más tranquilos y fáciles de digerir. Buenos temas donde elegir como Chicago Promenade o In a Razor Town es dificl que no le gusten a cualquiera. 

Southeastern es el disco de la madurez. Se supone que es la consecuencia de su abandono del alcohol y las substancias. Eso lleva a un disco de portada elegante. De música llena de adornos y temas de fácil entrada y enorme calidad. Uno de esos tipos a los que parece que las canciones le salen solas. Brilla Stockholm o Flying over water. Super 8 le lleva a épocas pasadas en las que la electricidad mandaba.

Nashville Sound dedica un tema a su centro de desintoxicacion. Da la sensacion de que se ha convertido en un capo del sonido del Sur. Lo merece. Hard working man donde los haya. Enorme Tupelo. Anxiety o If we were vampires insisten en sus historias espringstinianas de chico normal que aprecia su suerte pero al que le aterroriza saber que nada es para siempre. Me llega. El fiddle de su mejor me hace pensar en Lisa Germano.

Isbell is worth the time.