Otro buen disco de Los Deltonos

 

Este año, como casi todos los años, ha visto el alumbramiento de un nuevo disco de Los Deltonos. No es ninguna sorpresa. Lo hacen casi siempre. Riffs imaginativos, variedad blues rock, letras incisivas y raudales de personalidad. Casi da igual del disco que estuviésemos comentando. Lo anteriormente mencionado es válido para cualquiera en su extensa discografía. Canciones que mantienen las guitarras en portada como dicta el catálogo del rock más auténtico. Alejados de ningún parámetro o moda. Hendrick y sus amigos - o tal vez no tan amigos de acuerdo a lo que se ha podido leer por ahi - revitalizan el catálogo de los mejores power trios del blues rock de la historia. Se te vendrán a la cabeza las referencias claptonianas, mooricas, haynicas, hodgicas, rickrichardianas, ericgalesianas, anastasianas, derecktrucksicas ... todos esos que encontraron el punto entre los preciosos fraseos del blues clásico y la electricidad y el bendito volumen del rock. En ese negocio, Los Deltonos no son secundarios de nadie. Lo aderezan, eso si, con unas letras difíciles de encasillar. Hendrick Roever puede hacer canciones familiares, autobiográficas, reivindicativas ... en realidad el tema da un poco igual. La diferencia esta en el destinatario. Sueles ser tú. Si tú, tú que me miras. En una canción de los Deltonos, lo normal es que seas interpelado, que te hablen a tí, que se discuta tu propia autoestima, tus capacidades y tu juicio. Así es como le gusta a Roever. A mi me gusta. Aunque no es solo eso, claro. También puede ser autocritico. Es el carácter cántabro, supongo. Ese que le impulsa a plantearse si debió haber intentado más cosas. Haber sido más ambicioso. Esa ambición que si tuvieron algunos compañeros de los 90 (cuando fueron los reyes). A estas alturas de la película, poco importan esas cosas. Hendrick y su grupo ya no son los de Calamar o los de las versiones furiosas de blues. Son mucho mejores que aquello. Más viejos y más sabios. Más variados en su propuesta. Una propuesta que parece definida para amigos que aprecian lo que hacen. Sin muchas más ambiciones. No están los tiempos para mucho más si te dedicas a los solos de guitarra en este país.